Diabetes en perro: síntomas, causas y tratamiento
La diabetes en perros es una de las enfermedades hormonales más frecuentes y afecta el metabolismo del azúcar en la sangre. Esta enfermedad crónica requiere un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado para mejorar la calidad de vida del perro.
En este artículo veremos los síntomas más frecuentes, los factores que predisponen a la diabetes en perros, cómo se trata y la importancia de una alimentación adecuada.
¿QUÉ ES LA DIABETES EN PERRO?
La diabetes mellitus en perros es una enfermedad endocrina en la que hay una falta total o parcial de insulina. Esto provoca una hiperglucemia mantenida (altos niveles de glucosa en sangre).
La insulina es una hormona producida por el páncreas que permite que la glucosa pase de la sangre al interior de las células para ser utilizada como fuente de energía.
Según su causa, existen varios tipos de diabetes en perros:
Diabetes mellitus tipo 1 o insulinodependiente: el páncreas no produce suficiente insulina debido a la destrucción de las células β. Es la forma más común en perros y requiere la administración de insulina de por vida.
Diabetes mellitus tipo 2 o no insulinodependiente: el páncreas produce insulina, pero los tejidos se vuelven resistentes a ella. Es más común en gatos y humanos que en perros.
Diabetes secundaria a alteraciones hormonales: un exceso de progesterona o glucocorticoides en sangre puede inducir una resistencia a la insulina, como ocurre en la diabetes gestacional o en hembras durante el estro.
Diabetes secundaria a enfermedades pancreáticas: procesos inflamatorios como la pancreatitis crónica pueden dañar las células productoras de insulina, causando una diabetes irreversible.
SÍNTOMAS DE LA DIABETES EN PERROS
Si notas alguno de estos síntomas, es importante que acudas a tu veterinario para realizar una medición de la glucosa en sangre:
Este conjunto de síntomas se conoce como el "síndrome PPP" (polidipsia, poliuria y polifagia).
Si la diabetes no se trata a tiempo, pueden desarrollarse complicaciones graves.
COMPLICACIONES DE LA DIABETES EN PERRO
La hiperglucemia prolongada puede generar problemas secundarios:
Cetoacidosis diabética: es una emergencia médica. Se produce cuando el organismo, al no poder utilizar la glucosa, empieza a metabolizar grasas en exceso, liberando cuerpos cetónicos que acidifican la sangre. Puede causar vómitos, deshidratación, letargia y, en casos graves, coma diabético.
Cataratas: la hiperglucemia provoca una absorción anómala de agua en el cristalino del ojo, volviéndolo opaco. Sin tratamiento, puede derivar en ceguera irreversible.
Lipidosis hepática: el uso de grasas como fuente de energía puede generar un acumulación excesiva de lípidos en el hígado, afectando su función.
FACTORES QUE PREDISPONEN A LA DIABETES EN PERRO
Algunos factores aumentan el riesgo de desarrollar diabetes:
Obesidad, ya que provoca resistencia a la insulina.
Hembras sin esterilizar, por el efecto de la progesterona en la resistencia a la insulina.
Factores genéticos, más frecuente en razas pequeñas como el Schnauzer o el Caniche
Edad media o avanzada, aunque también puede afectar a perros jóvenes.
Pancreatitis crónica o enfermedades del páncreas.
TRATAMIENTO DE LA DIABETES EN PERRO
El tratamiento de la diabetes en perros tiene cuatro pilares fundamentales:
INSULINA
En la mayoría de los casos, el perro necesitará inyecciones de insulina de por vida para regular sus niveles de glucosa. La dosis se aplica de forma subcutánea cada 12-24 horas, dependiendo de las necesidades de cada perro. Es fundamental administrar la insulina después de la comida para evitar episodios de hipoglucemia. Si el perro presenta síntomas como desorientación, debilidad o desmayos, se le debe ofrecer alimento de inmediato o acudir al veterinario para que administre glucosa.
ALIMENTACIÓN PARA PERROS DIABÉTICOS
Los alimentos específicos para diabetes, como ADVANCE VETERINARY DIETS DIABETES para perro, ayudan a controlar el proceso:
Incluyen hidratos de carbono complejos (aquellos que necesitan romperse en moléculas más pequeñas hasta llegar a glucosa, como almidón) y de absorción lenta, para reducir las subidas bruscas de glucosa que se producen tras la alimentación.
Fibra, para ayudar a disminuir la velocidad de absorción de la glucosa, retrasa la hidrólisis (rotura) del almidón, y aumenta la sensibilidad de los tejidos a la insulina.
Bajo contenido en grasa, para ayudar a mantener un peso correcto.
CONTROL DE FACTORES EXTERNOS
El control de factores externos es clave para garantizar una mejor gestión de la diabetes en perros. En el caso de las hembras diabéticas, la esterilización es necesaria para evitar fluctuaciones hormonales que puedan alterar el control de la insulina. También es fundamental evitar el uso de fármacos que interfieran con su acción, como los glucocorticoides, y detectar a tiempo cualquier enfermedad concurrente que pueda agravar la diabetes, asegurando así un tratamiento más estable y efectivo.
MOONITORIZACIÓN EN CASA
La monitorización en casa juega un papel esencial en el manejo de la diabetes. Medir los niveles de glucosa en sangre con glucómetros portátiles permite detectar variaciones y ajustar el tratamiento si es necesario. También se pueden utilizar tiras reactivas para controlar la glucosa en la orina y, junto con un seguimiento veterinario frecuente, especialmente en las primeras semanas, se logra una mejor estabilidad en la salud del perro.
La diabetes en perros es una enfermedad crónica que requiere un compromiso constante, pero con el tratamiento adecuado, tu perro puede llevar una vida saludable y plena. Seguir una rutina estable de administración de insulina, proporcionar una alimentación adaptada y realizar controles veterinarios periódicos son las claves para su bienestar. Si sospechas que tu perro tiene diabetes, acude cuanto antes al veterinario para obtener un diagnóstico y comenzar un tratamiento personalizado según sus necesidades.
Publicado originalmente el 17 de agosto del 2022, actualizado el 12 de marzo de 2025