La artritis en perros: qué es y cómo se soluciona

La artritis es la inflamación de las articulaciones y puede producirse en los perros de diferentes formas. Tiene múltiples causas y hay diversas formas de tratarla y prevenirla. En las siguientes líneas compartimos contigo todo lo que debes saber sobre la artritis en perros.

¿Qué es la artritis de los perros?

La artritis es la inflamación de las articulaciones. Aunque utilizamos esta palabra como sinónimo de la afección que padecen los perros más mayores, en realidad la artritis puede ser de varios tipos y todos los perros pueden tener alguno de ellos.

Puede aparecer de forma rápida durando poco tiempo (la artritis aguda), o también puede aparecer poco a poco, de forma casi inadvertida al principio haciéndose más aparente con el tiempo, y dura mucho tiempo, meses, años o incluso toda la vida del perro (artritis crónica).

Para entender mejor la artritis, compartimos algunas claves acerca de esta dolencia que te ayudarán a comprenderla mejor.

  • Las articulaciones están formadas por varios elementos. En las artritis, se ven afectados todos..

  • Una articulación consiste en la unión de dos o más huesos para participar en el movimiento del cuerpo. 

  • Los huesos que componen una articulación están recubiertos de cartílago, que sirve para amortiguar y proteger al hueso que hay debajo. 

  • La articulación está rodeada por una membrana, y contiene líquido que amortigua los impactos del movimiento, que se llama líquido sinovial. 

  • Además, dentro de la articulación también están los ligamentos que unen los huesos y los tendones que sujetan los músculos.

La probabilidad de que perros y gatos padezcan artritis durante su ciclo de vida es del 25%. Esta puede afectar a cualquier articulación del cuerpo, pero principalmente lo hace a las articulaciones de movimiento libre, es decir, las sinoviales.

¿Por qué puede tener artritis mi perro?

Las causas de la artritis en los perros son muy variadas:

Las artritis agudas suelen ser muy dolorosas, es habitual ver una articulación o varias que están hinchadas y algo calientes, y el perro tiene cojera o le cuesta moverse. En el caso de la artritis aguda, que aparece de pronto y tiene corta duración, suele deberse a una o varias causas:

  • Lo más frecuente es un traumatismo: un golpe, una caída en una mala posición o una pelea, por ejemplo.

  • A veces puede deberse a una infección si entran bacterias dentro de la articulación. Puede deberse a una herida, por ejemplo, por una mordedura, y también aparece en algunos cachorros si no se desinfecta bien el ombligo después del nacimiento, porque las bacterias penetran por el ombligo y viajan a las articulaciones.

  • Algunas artritis se producen porque el sistema inmunitario del perro no funciona bien, por una enfermedad autoinmune, y los glóbulos blancos atacan los tejidos de las articulaciones.

 La artritis crónica a veces pasa desapercibida hasta que el daño a las articulaciones avanza y se hace evidente. Es menos frecuente que haya una hinchazón tan visible como en la artritis aguda, pero los perros también tienen dolor, cojera de la pata o las patas afectadas y dificultad para moverse, subir y bajar escaleras, o trepar al sofá, por ejemplo:.

  • La causa más frecuente de la artritis crónica es la osteoartritis, una enfermedad que afecta a muchos perros mayores. Se debe a que, con el tiempo y el movimiento, el cartílago de las articulaciones se va desgastando y estas se inflaman y duelen.

  • Hay perros que tienen predisposición a la artritis crónica y a la artrosis (que es la inflamación crónica y degeneración de las articulaciones) porque sus articulaciones tienen una conformación que no es correcta por causas hereditarias o por malformaciones, como es el caso de la displasia de cadera o la displasia de codo, por ejemplo, que es muy común en algunas razas y sus cruces.

  • Si un perro ha tenido una lesión en el pasado, como una fractura o un traumatismo grave, que le ha dejado secuelas, también podría tener artritis crónica con inflamación y artrosis al cabo del tiempo, pues han quedado cicatrices en los tejidos de la articulación que al final producen molestias.

¿Qué puedo hacer si mi perro tiene artritis?

Si te has preguntado sobre cuáles son los síntomas de artritis en los perros, puedes sospechar cuando cojea de una pata o de más de una, si tiene problemas para caminar o levantarse, o si no quiere levantarse. A veces puedes ver que alguna de sus articulaciones está hinchada y al tocarla está muy caliente. No siempre pasa esto, pues si es una artritis crónica no se ve a simple vista. Si está molesto, seguramente se lamerá mucho la zona que le duele o se la mira (por ejemplo, si es una articulación a la que no llega, como la cadera o entre las vértebras).

Si tu perro tiene alguno de estos síntomas, acude a tu veterinario para que pueda valorar si es una artritis, cuál puede ser su causa, cómo está de avanzada, y cuál es el tratamiento más adecuado. 

¿Se puede prevenir y tratar la artritis de los perros?

La artritis de los perros se puede tratar con múltiples planteamientos, que incluyen medicamentos, un manejo de la alimentación, complementos alimenticios que nutren las articulaciones, ejercicio moderado, vendajes e inmovilización si es necesario, y cirugía en algunos casos. Tu veterinario te explicará cuál es la mejor opción para tu perro, con el objetivo de que se encuentre mejor y pueda moverse de la manera más fácil para él.

Es preferible prevenir la artritis; en primer lugar, evitando en la medida de lo posible los accidentes con paseos y juego por zonas seguras. Además, mantener una buena higiene para prevenir las infecciones es imprescindible. Por último, para los perros con predisposición a la artritis por ser de una raza o tener una conformación que hace que sus articulaciones sufran un estrés excesivo, se pueden prescribir ejercicios especiales, fisioterapia, o algunos productos que en muchos casos consiguen que el desarrollo de la artritis crónica y la artrosis sea más lenta.

La artritis en perros es la inflamación de las articulaciones, y puede deberse a múltiples causas. Es fundamental acudir al veterinario cuanto antes para encontrar la causa y ponerle un tratamiento adecuado a tu perro para que se encuentre mejor y mejorar su movilidad.

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