¿Los gatos lloran?

¿Has notado que tu gato parece llorar o maullar de manera inusual y te preocupa que pueda tener dolor o malestar? Aunque los gatos no lloran como lo hacemos los humanos, tienen formas de comunicar sus necesidades y emociones que pueden parecerse a llantos. En este artículo, exploraremos las razones detrás de los maullidos y cómo puedes interpretar correctamente el comportamiento de tu gato para asegurarte de que esté saludable y feliz.

¿Los gatos lloran como los humanos?

La respuesta es no. Las personas, cuando sentimos algo de dolor, ya sea físico o emocional, segregamos lágrimas. Es un proceso del cuerpo que se produce para limpiar, proteger y lubricar el globo ocular. Eso sí, todavía no hemos descubierto cuál es la razón por la que nuestro cuerpo activa estas lágrimas. Lo que sí está claro es que en momentos de mucha alegría y felicidad, o, por lo contrario, en momentos de tristeza, enfado o rabia, nuestro cuerpo reacciona llorando: es la forma de expresar estas emociones.

Los gatos también tienen esta capacidad: se emocionan, ya sea por felicidad o por tristeza, y su cuerpo activa ciertos mecanismos, al igual que los humanos. Asimismo, también tienen maneras de expresarlo, aunque no mediante lágrimas. Los gatos lloran de otra manera, transmitiendo quejas y llantos a través de sus maullidos. Esa es su manera de expresarse y comunicarse contigo de forma sencilla y directa.

¿Por qué llora mi gato?

Existen muchas causas por las que tu gato llora demandando atención:

  • Cuando son cachorros

    Cuando los gatos son pequeños, de muy poca edad, pueden maullar o quejarse para llamar a su madre porque les falte alimento, cobijo o se sientan solos. 

  • Al llegar a un nuevo hogar

    A los gatos les cuesta adaptarse a un nuevo hogar, tienen que aclimatarse a la nueva casa, a su nuevo espacio y a su nueva familia. No debe ser un tiempo muy largo, una semana aproximadamente. Tu gato puede llorar por sentirse extraño en su nuevo hogar, desprotegido o porque tiene miedo. Cuando ya se sienta a gusto y todo el calor del hogar, su comportamiento cambiará.

  • Al comenzar el día

    Tu gato puede emitir sonidos de llanto o maullidos al comenzar el día. O cuando llegas a casa. Puede ser que te esté deseando unos buenos días o simplemente te esté saludando. ¿Te has fijado alguna vez si en estos momentos los maullidos son diferentes a los habituales?

     

     

  • Reclamar comida

    Una de las grandes razones por la que pueda parecer que tu gato esté llorando es por la comida. Si tiene hambre o quiere más, seguramente empiece a maullar cerca de su bol.

  • Por una mal nutrición

    Los gatos también lloran por una posible falta de nutrientes. Si no se aporta todo lo que necesita, un gato puede desarrollar problemas de salud y malestar. Es importante que tu gato lleve una alimentación sana y equilibrada para evitar enfermedades relacionadas con la falta de nutrientes.

  • Al llegar a una determinada edad

    Los gatos que ya son un poco mayores, pueden quejarse por algún dolor o alguna enfermedad. Enfermedades no visibles, como la artritis, artrosis o insuficiencia renal, pueden ser muy habituales en tu gato mayor. Debes acudir a tu veterinario lo antes posible para que le haga un chequeo exhaustivo.

  • Celo

    El celo puede ser otro motivo por lo que tu gato pueda llorar. En estas temporadas, que suelen coincidir con épocas de mucha luz, tu gato estará más hiperactivo, irritable y querrá escaparse de casa por cualquier medio para reunirse con otros gatos. Si tu gato no está esterilizado consulta a tu veterinario de confianza, él te aconsejará lo mejor que puedes hacer según tu situación.

     

     

Principales cuidados para los gatos

Cuidar a un gato va más allá de darle comida y un lugar para dormir. Los gatos requieren atención para asegurar su bienestar físico y emocional.

  • Alimentación

    La alimentación es una de las facetas más importantes que cuidar en un gato. Proporciónale una dieta equilibrada, rica en proteínas y adecuada para su etapa de vida (cachorro, adulto o senior). Evita darle alimentos para humanos, especialmente los que pueden ser tóxicos como el chocolate, la cebolla o el ajo.

  • Higiene

    Los gatos son animales muy limpios, pero necesitan ayuda en ciertos aspectos. Cepilla su pelaje regularmente para evitar la formación de bolas de pelo, especialmente en razas de pelo largo. También debes prestar atención a la limpieza de sus orejas y dientes para prevenir infecciones.

  • Ejercicio y estimulación mental

    Los gatos son cazadores naturales, por lo que es importante ofrecerles juguetes y actividades que imiten el comportamiento de caza. El juego diario mantiene su mente y cuerpo activos, previniendo el sobrepeso y el estrés.

  • Salud

    Las visitas periódicas al veterinario son importantes. Asegúrate de que tu gato esté vacunado y desparasitado. Además, observa cambios en su comportamiento, apetito o aspecto físico, ya que pueden ser signos de problemas de salud.

Ahora ya sabes que los gatos no lloran como nos imaginamos. Sí que pueden enfadarse, estar alegres o tristes, y lo pueden comunicar en forma de quejido. Pero nunca lloran tal y como lo hacemos nosotros.

Publicado originalmente el 21 de octubre de 2021, actualizado el 7 de octubre de 2024

Mar Campmany
Cirugía

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