Todas las especies tienen una tendencia determinada a sufrir ciertas patologías y no otras. Y los gatos, por ser gatos, también. La lista de enfermedades probables y frecuentes que puede ocurrir si se cumplen las condiciones para que una determinada enfermedad avance es amplia.
¿Cuál es, entonces, esa lista de enfermedades gatunas, generales y frecuentes? Estas son algunas:
LA ALERGIA
La bronconeumonía
La bronconeumonía es una inflamación aguda de los bronquios y los alveolos pulmonares. Verás a tu gato con los ojos llorosos, mucosidad, tos e incluso úlceras en la boca.
LA GRIPE DEL GATO
La enfermedad respiratoria más frecuente es la gripe del gato (RVF), causada por un herpesvirus. Los síntomas suelen ser lagrimeo en los ojos, tos y estornudos, congestión nasal y mucosidad densa. Tu veterinario le prescribirá antibióticos, que deberás suministrarle hasta el final del tratamiento que él te indique, aunque veas en tu gato síntomas de mejoría a la brevedad.
CATARATAS
En sus ojos, cataratas –opacidad del cristalino-: observarás que el interior de la pupila es de color blanco. Aunque también puedes detectarlo si ves a tu gato chocar contra los muebles o si evita subir a lugares elevados. La única solución es la intervención quirúrgica.
LAS INFLAMACIONES
La estomatitis, que es una inflamación de la mucosa bucal y las encías, suele ser desencadenada por la presencia de sarro y que puede afectar al paladar, la lengua o las encías.
La faringitis: tu gato mostrará dificultad para tragar, tos, fiebre, cansancio y falta de apetito.
La otitis, que es el proceso inflamatorio del conducto auditivo y que puede tener consecuencias muy graves ya que, de no curarse a tiempo, puede resultar en la perforación del tímpano.
INSUFICIENCIA RENAL
A partir de cierta edad, es muy común la insuficiencia renal. Los riñones felinos realizan una intensa tarea de filtrado. Sospecha de este problema si tu gato come menos, adelgaza e incrementa mucho el volumen de agua que bebe y de orina que elimina.
